Las Características Cardinales del Evangelio del Reino de Dios

Hago énfasis en los siguientes cinco puntos como representativos de las características cardinales del evangelio del reino de Dios:

1. La preeminencia del individuo. 2. La voluntad como factor determinante en la experiencia del hombre. 3. La comunión espiritual con Dios el Padre a través de su Ajustador del Paraíso. 4. Las satisfacciones supremas del servicio amoroso del ser humano. 5. La transcendencia de lo espiritual sobre lo material en la personalidad humana. Este mundo nunca ha probado seria o sincera u honestamente estas ideas dinámicas e ideales divinos de mi doctrina del reino de los cielos. Pero no debéis desanimaros por el progreso aparentemente lento de la idea del reino en Urantia. Recordad que el orden de la evolución progresiva está sujeto a cambios periódicos repentinos e inesperados tanto en el mundo material como en el espiritual. Los autootorgamientos de los siglos I y XXI como Hijo encarnado son precisamente un acontecimiento extraño e inesperado de este tipo en la vida espiritual del mundo. Tampoco cometáis el error fatal, al buscar la manifestación del reino en la era, de no efectuar su establecimiento dentro de vuestra propia alma de personalidad individual. Aunque el acercamiento a la presencia paradisiaca residente del Padre debe esperar a que alcancéis los niveles finitos más elevados de progresión espiritual, deberíais regocijaros en el reconocimiento de la posibilidad siempre presente de comunión inmediata y proximidad directamente inminente con el espíritu autootorgador del Padre tan íntimamente asociado con vuestra alma interior y vuestro yo espiritualizante. Si el hombre mortal está motivado espiritualmente de todo corazón, consagrado sin reservas al cumplimiento de la voluntad del Padre, entonces, puesto que está tan ciertamente y tan eficazmente dotado espiritualmente por el Ajustador residente y divino, no puede dejar de materializarse en la experiencia de ese individuo la consciencia sublime de conocer a Dios y la seguridad excelsa de sobrevivir con el propósito de encontrar a Dios mediante la experiencia progresiva de parecerse cada vez más a él. El hombre está espiritualmente habitado por un Ajustador del Pensamiento superviviente. Si dicha mente humana está sincera y espiritualmente motivada, si dicha alma humana desea conocer a Dios y llegar a ser como él, desea honestamente hacer la voluntad del Padre, no existe influencia negativa de privación mortal ni poder positivo de posible interferencia que pueda impedir que dicha alma divinamente motivada ascienda con seguridad a los portales del Paraíso. Michael Of Nebadon Urantia Planet